La pinacoteca madrileña va a ver incrementada su colección con 39 obras de 12 artistas latinoamericanos, encuadradas cronológicamente desde los años sesenta del siglo pasado hasta la actualidad. Una donación que forma parte de una iniciativa que engloba a otros museos como el MoMA o el Museo de Arte de Lima
La colección del Museo Reina Sofía se va a ver enriquecida de manera sustancial al recibir la importante donación que se acaba de hacer efectiva por parte de la Colección Patricia Phelps de Cisneros (CPPC) y que se compone de treinta y nueve obras de doce artistas latinoamericanos, encuadradas cronológicamente desde los años sesenta hasta la actualidad.
Esta donación al Museo Nacional Centro de Arte Reina Sofía forma parte de una iniciativa global que involucra seis instituciones con las que la CPPC tiene una larga relación y una misión compartida de estimular un mayor conocimiento sobre el arte de América Latina en un contexto global. Las obras que conforman la donación han sido seleccionados en colaboración con cada museo de acuerdo con sus características particulares. Las otras cinco instituciones son el Museo de Arte de Lima (MALI), el Museo de Arte Moderno de Buenos Aires (MAMBA), The Museum of Modern Art (MoMA) de Nueva York, el Blanton Museum of Art at the University of Texas de Austin y The Bronx Museum of the Arts de Nueva York.
Con la inclusión de jóvenes, como Osías Yanov, Mathias Duville y Federico Herrero, la donación realizada el Museo Reina Sofía afianza el proyecto recientemente abierto en el museo que enfoca la contemporaneidad como un campo fértil para reflexionar sobre la intersección de las prácticas artísticas y la producción de relatos sobre el momento que vivimos. A la vez, con artistas de una generación anterior, como Claudio Perna, Luis Fernando Benedit y Waltércio Caldas, se va a poder trazar nuevas conexiones entre los diversos conceptualismos de esta región.
El destacado conjunto de obras que se recibe de la CPPC, seleccionado en colaboración con el Reina Sofía, abre al museo nuevos caminos para explorar cómo el campo de la producción artística latinoamericana se ha establecido como un espacio de interpelación social y reflexión histórica durante los últimos cincuenta años. La inclusión en la colección del Reina Sofía va a enriquecer las principales líneas de investigación del museo. Entendida así, esta importante donación refuerza el mapa de prácticas artísticas que han marcado y siguen marcando el arte latinoamericano.
Aunque en un presente globalizado donde se impone un tipo de artista nómada, es cada vez más difícil descubrir artistas que trabajen desde una mirada singular, los doce nombres que integran la donación, pese a la diversidad generacional y el diferente origen geográfico (Argentina, Brasil, Colombia, Costa Rica, España, Paraguay y Venezuela) conforman un grupo unitario. Todos ellos comparten cierta mirada excéntrica sobre el relato predominante de la historia del arte y muchos consiguen posicionarse sobre realidades particulares en momentos históricos distintos, entre los que podemos trazar relatos comunes con un planteamiento de nuevos lenguajes artísticos.
“A través de sus programas, alianzas y exhibiciones, el Reina Sofía se ha convertido en un protagonista en la articulación y preservación de la historia de la cultura del Sur Global”, declaraba Patricia Phelps de Cisneros. Y en concreto a propósito de esta donación ha afirmado que “tendrá el potencial de aumentar aún más las nuevas lecturas del arte de América Latina que han caracterizado la acción del museo a escala global”.