Bajo el título de Durius Flumen, la artista ha realizado un conjunto de esculturas que se exhiben en el centro histórico de esta ciudad burgalesa. A su vez, en la galería Rodrigo Juarranz de la misma localidad se muestran los bocetos, dibujos y maquetas preparatorias de estas piezas junto a otras obras de Mar Solís que ayudan a contextualizar su lenguaje creativo. Hasta el 18 de agosto
En una entrevista que publicamos en el número de junio de la revista DESCUBRIR EL ARTE, Mar Solís nos comentaba que el año 2016 está lleno de proyectos, algunos ya realizados, como la excelente exposición que tuvo lugar en la galería Ansorena de Madrid y otros todavía por materializarse.
También nos confesaba que no le gusta limitarse a su trabajo más reconocible, y por el que ha triunfado, y por eso está muy ilusionada con el proyecto multidisciplinar que realizará próximamente en el MACA de Alicante, en el que experimentará con nuevas tecnologías y unirá dos de sus facetas artísticas, la escultura y la escenografía, en una única pieza. Junto a 11 personas, entre percusionistas, una coreógrafa, bailarines y una pareja especialista en tecnología de seguimiento del movimiento (HTC), dos grandes esculturas serán movidas por los bailarines y todos esos movimientos quedarán registrados por una cámara que los proyectará en una pantalla y se materializarán, a su vez, en una nueva pieza escultórica impresa en 3D.
También el movimiento, pero en este caso del agua, es el eje sobre el que Mar Solís ha desarrollado esta exposición de esculturas urbanas en Aranda de Duero y que ha titulado Durius flumen (Río de Oro), en honor al río que surca y da nombre a la ciudad castellana. Organizada por la Concejalía de Cultura del Ayuntamiento de Aranda de Duero en colaboración con la galería de arte Rodrigo Juarranz, un total de diez esculturas en acero corten, cuatro de ellas de 4 metros y ocho de 2 metros, se exhiben en el centro histórico, desde la plaza de los Tercios hasta la calle San Juan. Una de las obras pasará a formar parte de la colección del Ayuntamiento. Las cuatro piezas grandes son polivalentes y se pueden colocar de cuatro formas distintas, separadas o acopladas hasta convertirse en una sola escultura.
Además de su pasión por la escultura, Mar Solís se declara una dibujante compulsiva. “Mis cuadernos de artista, de viaje, como los llamo yo, es donde planto la primera semilla para fabricar cualquier pieza. Son incentivos artísticos”. Por eso, como complemento a la muestra de esculturas urbanas, la galería Rodrigo Juarranz de Aranda de Duero presenta una selección de estos cuadernos de artista junto a las maquetas preparatorias de las piezas que el público puede ver en la calle.
Á.S.C.