Íñigo Navarro: «Una galería siempre debe alentar el coleccionismo»

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A lo largo de sus más de cuarenta años de historia la galería Leandro Navarro ha presentado infinidad de exposiciones relacionadas sobre todo con las vanguardias nacionales e internacionales y la figuración contemporánea española. La última, Los paisajes nórdicos de Jorge Castillo, que podrá verse hasta el 1 de marzo. DESCUBRIR EL ARTE habla con Íñigo Navarro, director de la galería, sobre sus artistas y las exposiciones que han realizado a lo largo de estos años y también sobre la muestra Realistas de Madrid del Museo Thyssen-Bornemisza

PREGUNTA: Jorge Castillo llevaba mucho tiempo sin exponer en España. ¿Qué tipo de obra puede verse en la exposición de la galería?

Iglesia de Estocolmo, de Jorge Castillo, acrílico sobre lienzo, 150 x 100 cm.

Iglesia de Estocolmo, de Jorge Castillo, acrílico sobre lienzo, 150 x 100 cm.

ÍÑIGO NAVARRO: Su exposición anterior fue en 2010, y desde entonces había hecho proyectos fuera, como este de Suecia y que ahora presentamos nosotros. Hay mucho interés por su obra fuera de España, por eso creo que en España es importantísimo mantener un vínculo con la obra de Jorge Castillo. La exposición anterior tuvo mucho éxito por lo que supuso de encuentro con coleccionistas suyos y que le habían perdido la pista y también porque algunas instituciones mostraron interés por retomar la obra de este artista.

En esta exposición presenta una serie de cuadros que muestran la brutalidad del paisaje nórdico, el frío, la nieve o el mar helado. Hay una serie de cuadros que retratan la tempestad, y el propio Castillo me comentaba que mientras los pintaba casi se lo lleva el viento; ese es Jorge Castillo.

Íñigo Navarro (izda.) y Jorge Castillo (dcha.) junto a "El escondrijo", 2014-15, acrílico sobre lienzo, 200 x 200 cm.

Íñigo Navarro (izda.) y Jorge Castillo (dcha.) junto a la obra «El escondrijo», 2014-15, acrílico sobre lienzo, 200 x 200 cm, en la exposición de la galería Leandro Navarro de Madrid.

En la amplia producción de Jorge Castillo (Pontevedra, 1933), fruto de sus más de sesenta años dedicados a la creación artística, apenas había hecho paisajes –solamente en su etapa de Nueva York había realizado algunos urbanos–. Por eso es sorprendente descubrir que con más de ochenta años haya acometido una serie como la que presenta ahora en nuestra galería sobre paisaje nórdico.

Es un artista que nunca ha interrumpido su trabajo y que necesita seguir evolucionando; de grandes rupturas, aunque eso le haya silenciado en determinadas etapas de su carrera.

Tormenta en Orensund.

Tormenta en Orensund.

P: Háblenos de los inicios de esta galería que ha tenido un papel tan relevante en el panorama artístico español.

Leandro Navarro, fundador de la galería.

Leandro Navarro, fundador de la galería.

Í. N.: El fundador de la galería fue mi padre Leandro Navarro, que comenzó en 1971 en la galería Biosca y a partir de 1979 en solitario, cuando abre su primer espacio en la calle Claudio Coello. En 1983 nos trasladamos a nuestra ubicación actual en la calle Amor de Dios. Y ahora aunque soy yo el que dirijo la galería, a día de hoy sigo comentando con mi padre muchas obras que entran en la galería. Hay que tener en cuenta que en este trabajo es importante el tiempo, toda esa información que se tiene después de tantos años es un patrimonio y que al final conforma el fondo y el archivo documental de la galería.

P.: En estos más de cuarenta años de trabajo ininterrumpidos de trabajo, ¿qué exposiciones destacaría?

Í. N.: Hay muchas, pero quizá por la trascendencia que tuvo en su momento, la de Giorgio Morandi en 2004, que fue la primera que se dedicaba al pintor italiano en España, o la de Kurt Schwitters (2008), Picasso, Miró, Pablo Gargallo, Julio González, Torres-García. También destacaría Cincuenta años después (2008), que conmemoraba la exposición en el Ateneo madrileño del grupo de realistas de Madrid –prácticamente los mismos que pueden verse ahora en la muestra del Thyssen– y en la que Antonio López presentó por primera vez las Cabezas de Carmencita, y la titulada El estudio de la calle Bolsa (2004), de Carmen Laffón, que fue muy importante en la carrera de la artista porque presentó instalaciones de esculturas de gran formato y una serie de dibujos interesantísimos, que abrieron la puerta a todo el desarrollo que ha hecho Laffón posteriormente.

P.: ¿Cómo definiría el proyecto de la galería?

Í. N.: La galería tiene dos ejes en los que se sustenta el proyecto expositivo, por un lado las Vanguardias históricas y el arte moderno, nacional e internacional, con importantes legados como el de Oskar Schlemmer, Pablo Gargallo, Millares o Juan Barjola. Por otro, el arte contemporáneo, especializado en la corriente figurativa, con un estrecho vínculo con Antonio López, Carmen Laffón, Julio López Hernández (que va a exponer también este año en la galería), Francisco López o José Hernández; en definitiva, el realismo que nace a finales de los sesenta y principios de los setenta. Asimismo, hemos ido incorporando a pintores más jóvenes que han continuado esta senda del realismo, como Joaquín Risueño, Juan Carlos Savater, Félix de la Concha o Gerardo Pita, porque nos interesa establecer relaciones entre las distintas generaciones. A las dos corrientes nos dedicamos con mucha ilusión.

P.: ¿Cómo se ha ido incorporando esta nueva generación de artistas?

Í. N.: Ha sido un proceso natural. Como decía antes, en nuestro caso el arte contemporáneo está circunscrito a la figuración, el realismo, así que no los captamos en ferias o otras exposiciones, sino que más bien son los propios artistas los que te van llevando de una generación a otra. Muchas veces son creadores, como Antonio López o con Carmen Laffón, los que nos hablan de algunos de los artistas más jóvenes. Además, nuestra captación de artistas nuevos es pequeña porque estamos haciendo entre tres o cuatro exposiciones al año y de ellas, dedicamos dos a la Vanguardia histórica, así que solamente quedan dos o tres como máximo de arte conemporáneo al año. No tenemos interés en acaparar mucho sino dar, de alguna manera, cabida a la pintura figurativa desde el final de los sesenta hasta ahora con nombres muy señalados y con vínculos entre las distintas generaciones. Además, cuando hablamos de los jóvenes que vamos incorporando, en realidad son artistas maduros, en torno a los cuarenta años, y que tienen una carrera ya muy avanzada. Nosotros les podemos aportar un coleccionismo que a ellos les interesa mucho y se adscriben a nuestro proyecto.

P.: ¿Cada cuánto tiempo exponen sus artistas en la galería?

Í. N.: Las exposiciones suelen ser cada cinco años porque hay que tener en cuenta que los artistas que trabajan el realismo producen muy poco, y la galería requiere en torno a unas 25 obras para una exposición y reunir esa cantidad no es sencillo, así que son proyectos que tardan en materializarse en torno a cinco o seis años. Además muchos de ellos tienen que compatibilizar compromisos con otras galerías internacionales o museos.

Las cabezas de Carmencita de Antonio López, que se expusieron por primera vez en esta galería y que formaron parte de la exposición 50 años después.

Las cabezas de Carmencita de Antonio López, que se expusieron por primera vez en esta galería y que formaron parte de la exposición 50 años después.

P.: Supongo que de alguna manera deben de sentirse parte de la exposición Realistas de Madrid del Museo Thyssen-Bornemisza de Madrid…

Í. N.: Estamos muy ilusionados con esta muestra porque es muy difícil ver reunida la obra de este grupo, ya que por un lado es escasa y por otro, mucha de su producción está fuera de España. Volver a ver una exposición de este colectivo tan bien representada como está en este museo será difícil. Creo que va a causar mucha sorpresa en el público ver las obras al natural porque muchas veces se conocen por fotografías. Antonio López está inmensamente feliz de que se presente una exposición del grupo porque muchas veces es su figura la que se reivindica permanentemente aunque hay un colectivo de artistas que iniciaron el movimiento con él y que a veces están en un plano más sesgado. Además, es un grupo en el que las mujeres artistas tienen mucha presencia. Muchos de ellos se hicieron familia, como Antonio López, que se casó con María Moreno, Julio López Hernández con Esperanza Parada y Francisco López con Isabel Quintanilla. Es muy interesante el caso de la pareja formada por Amalia Avia y Lucio Muñoz porque se vinculó el mundo de la abstracción de Muñoz con la figuración de Avia y se establecieron unas conexiones muy enriquecedoras entre la abstracción y la figuración.

Esta obra de Benjamín Palencia formó parte de la exposición Benjamín Palencia-Castellanos en 2016.

Esta obra de Benjamín Palencia formó parte de la exposición Benjamín Palencia-Luis Castellanos en 2016.

P.: Han realizado algunas exposiciones de la galería que podría haber firmado cualquier museo. En este caso, ¿las obras también están a la venta?

Í. N.: El objetivo de una galería debe ser siempre alentar el coleccionismo, de particulares e instituciones, como en el caso de nuestra anterior exposición, Benjamín Palencia y Luis Castellano, a raíz de la cual el Reina Sofía ha adquirido una obra emblemática de este último junto con todos los dibujos preparatorios (Los atletas, h. 1940).

Los atletas, de Luis Castellano, h. 1940, Madrid, Museo Reina Sofía.

Los atletas, de Luis Castellano, h. 1940, Madrid, Museo Reina Sofía.

P.: Además de a particulares ¿han vendido obras a instituciones y museos?

Í. N.: Esa ha sido una de las constantes de la galería. Estamos orgullosos de haber podido contribuir a completar colecciones de instituciones y museos. Como en el caso de Giorgio Morandi, que apenas había obra suya en España, o de Kurt Schwitters, cuya presencia también era escasísima, y que compraron varias instituciones, como la Fundación Mapfre o el Reina Sofía. Además, han adquirido otras obras en nuestra galería la Fundación Telefónica, la Fundación del Banco Santander, el Ministerio de Cultura o la Hispanic Society.

P.: ¿Qué expectativas tienen de cara a Arco?

Í. N.: Este año es el 35 aniversario de la feria y se ha hecho un programa impresionante al invitar a 35 galerías que históricamente participaron en sus inicios, la aceptación ha sido enorme y van a acudir algunos nombres de primera línea del arte contemporáneo internacional. Hay un programa de coleccionismo internacional muy importante de Europa, Latinoamérica y EE UU, y eso ha hecho que una feria que podría haber tenido una crisis importante, en cambio su progresión haya sido muy favorable tanto el año pasado como el anterior. Nosotros estamos designados en Vanguardia histórica, así que llevamos obra de nuestro fondo, incluido los legados con los que trabajamos, como Picasso, Miró (una escultura del año 49 muy importante), Oskar Schlemmer, (que estamos introduciendo en los últimos años), Tàpies, Millares o Manolo Ribera (otro de nuestros legados). Y también habrá alguna sorpresa

Ángela Sanz Coca

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