La exposición «Capa en color» en el Jeu de Paume recupera una faceta menos conocida del fotógrafo Robert Capa: la de sus imágenes en color. Empezó a experimentar con él a partir de 1938, pero no abandonó el blanco y negro. Combinaba las dos miradas, con sensibilidades y plásticas distintas. La muestra en París refleja que el color fue enriquecedor complemento para uno de los grandes de la historia del fotoperiodismo. Hasta el 29 de mayo
Las fotografías más emblemáticas de Robert Capa (Budapest, 1913-Indochina, 1954) son en blanco y negro: su París de los años 30, la Guerra Civil española con aquella Muerte de un miliciano, la Segunda Guerra Mundial, la posguerra o las últimas imágenes que realizó en Indochina. Por eso muy pocas de las retrospectivas que se le han dedicado desde su muerte hasta ahora han incluido color. La exposición itinerante que se puede visitar en el centro Jeu de Paume de París se centra precisamente en sus trabajos en color y quiere demostrar cómo este renovó la visión del fotógrafo y le otorgó una nueva sensibilidad, complementaria a la que ofrecía en sus estremecedoras tomas en blanco y negro. Arriba: una de las últimas fotografías tomadas por Capa, en mayo de 1954 en Indochina.

Espectadores en el hipódromo de Longchamp, París, por Robert Capa, h. 1952 Robert Capa/International Center of Photography/Magnum Photos.
Capa empezó a experimentar con el color en 1938, dos años después de que Kodak desarrollará su primer rollo en color. Estaba cubriendo la guerra chino-japonesa; de todas las fotografías que se publicaron suyas de ese conflicto solo cuatro fueron en color, pero él siguió insistiendo y pudo comprobar que tras la Segunda Guerra Mundial los editores empezaron a abrirse más y permitir que el color empezara a competir con el blanco y negro. A partir de entonces, Capa iba siempre cargado por lo menos con dos cámaras, una para blanco y negro y otra para color, según cuenta Cynthia Young, comisaria de esta exposición y de los archivos del fotógrafo que conserva el International Centre of Photography.
La exposición Capa en color está organizada por el International Center of Photography de Nueva York (ICP) y el Jeu de Paume, donde estará abierta hasta el 29 de mayo. Al hilo de su paso por Nueva York entre finales de 2013 y la primavera de 2014, Marie-Genèvieve Alquier B. escribió un interesante artículo para Descubrir el Arte 182, cuya lectura recomendamos (la revista está disponible en quiosco.arte.orbyt.es y en la tienda de nuestra web). «No es que esas imágenes coloridas, casi inéditas, sean más plásticas, pero sí poseen otra plástica», describe el artículo que además de mirar hacia el color, recuerda toda la trayectoria de ese gran fotoperiodista que sentenció: «Si tus fotos no son buenas es que no estás lo bastante cerca».

Capitán americano Jay F. Shelley delante del bombardero “The Goon,” a B-17 bomber, por Robert Capa, 1943 © Robert Capa/International Center of Photography/Magnum Photos.
En color, Capa recogió fundamentalmente escenas de la vida cotidiana y de personajes famosos, una faceta más amable y glamurosa que la que le ha hecho famoso, pero también dejó testimonio de una travesía por el Atlántico con un convoy aliado, de algunas escenas de la Segunda Guerra Mundial o de Indochina, donde fue enviado por la revista Life en 1954 para cubrir los disturbios que desencadenarían en el desmembramiento de la administración colonial francesa y llevarían a Indochina a formar los dos Estados independientes de Vietnam. Esas últimas fotos (murió allí el 25 de mayo de 1954 al estallar una mina bajo sus pies) se han considerado el precedente de cómo cubrieron los fotoperiodistas la guerra de Vietnam.
La muestra reúne cerca de 150 fotografías a color y documentos como papeles personales de Capa y recortes de las revistas en las que se publicaron esas imágenes. Propone un recorrido que comienza en la Segunda Guerra Mundial, con pocas muestras del conflicto porque las circunstancias no eran favorables para el trabajo en color: Kodak mantenía en secreto su fórmula, eso hacía el revelado muy complicado y lento porque debía mandarse a una planta de la firma que devolvía las fotos a Capa; además, tampoco podía confiar en la respuesta de las revistas. La segunda parada es Estados Unidos; de esta etapa son los retratos de Orson Welles y Martha Gellhorn o las fotografías que realizó siguiendo a una familia de circo.

Familia Rambaugh, Circo, por Robert Capa, Indiana, USA, 1949 © Robert Capa/International Center of Photography/Magnum Photos.
Su viaje a URSS con el escritor John Steinbeck y sus fotografías de la Plaza Roja constituyen otro capítulo de la muestra. Era 1947, el mismo año que fundó la agencia Magnum, junto a David Seymour Chim y Cartier-Bresson, entre otros. Llevaba desde 1938 soñando con crear esa agencia, que se convirtió en un sello de identidad y de calidad fotoperiodística en el mundo entero. También viajó a Hungría, su país natal, Marruecos, Israel, Noruega, Deavuille, Biarritz, Roma, París, Londres, Japón e Indochina; de todos ellos dejó constancia también en color, algunas de las imágenes reflejan glamour, otras cambios sociales y políticos, acontecimientos históricos…
- Pablo Picasso jugando en el agua con su hijo Claude, cerca de Vallauris, Francia, por Robert Capa, 1948 © Robert Capa/International Center of Photography/Magnum Photos.
- Espectadores en Piccadilly Circus en la procesión antes de la coronación de la reina Isabel II, por Robert Capa, Londres, 6 de febrero, 1953 © Robert Capa/International Center of Photography/Magnum Photos.
La muestra, además de invitar a viajar por distintos a través de las imágenes de Capa, se para en algunos temas en concreto: Picasso, a quien fotografió con su familia en 1948; el esquí, uno de los pasatiempos favoritos del fotógrafo; la Generación X, término que acuñó él mismo para designar a la generación que siguió al baby boom, la que creció tras la Segunda Guerra Mundial y que fue retratada a través de las entrevistas a 24 jóvenes de 14 países para un ensayo fotográfico en el que también participaron Chim, Cartier-Bresson y Eve Arnold; y la escena, que nos recuerda su afinidad y amistad con personajes del mundo del cine como John Huston o su romance con Ingrid Bergman. Algunos de sus retratos en color están tomados durante los ensayos de los rodajes y tienen una vivacidad y dinamismo especiales. Esas escenas constituyen quizás el mejor ejemplo del glamour y la vida placentera que se asocia a sus tomas en color, frente al drama de las guerras en blanco y negro.
- Judith Stanton, por Robert Capa, Zermatt, Suiza, 1950 © Robert Capa/International Center of Photography/Magnum Photos.
- Humphrey Bogart y Peter Lorre el el rodaje de La burla del diablo, por Robert Capa, Ravello, Italia, abril 1953 © Robert Capa/International Center of Photography/Magnum Photos.

Ava Gardner en el rodaje de La condesa descalza, por Robert Capa, Tivoli, Italia, 1954 © Robert Capa/International Center of Photography/Magnum Photos.