El esfuerzo de Hércules

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El Reali Poste de las Galerías de los Uffizi acoge una muestra compuesta por 51 obras entre esculturas, relieves, pinturas o grabados cuyo protagonista es este héroe de griegos y romanos y que en el Renacimiento fue el símbolo de los ideales políticos de la República de Florencia. Hasta el 31 de enero

La décimoquinta cita de la serie Los nunca vistos exhibe un conjunto de 51 obras que enfocan al más famoso de los héroes griegos, Heracles, hijo de Zeus, llevado al cielo entre los dioses, y posteriormente adoptado por los romanos con el nombre de Hércules.

“La figura de Hércules, que en el Renacimiento era el símbolo de los ideales políticos de la República de Florencia, es un óptimo emblema también para la reforma de los museos florentinos y nacionales –afirma Eike Schmidt, nuevo director de las Galerías de los Uffizi–. Y gracias a la dedicación y al entusiasmo de docenas de personas, hemos logrado organizar esta exposición en menos de seis semanas entre la primera idea y la reciente inauguración. Y con este espíritu de colaboración afrontamos ahora juntos las ‘Fatigas’ de la lucha contra la Idra de la burocracia, contra el aprovechado Caco y, con la misma energía, ‘limpiamos las cuadras’ de la disfuncionalidad y de la desorganización”. Excelentes premisas para la flamante dirección del prestigioso museo.

Coronación de la Musa, de A. Allori, Galería de los Uffizi.

Hércules coronado por las Musas, de Alessandro Allori, 1568, Galería de los Uffizi.

La figura del fuerte Hércules, reproducido repetidamente en la escultura antigua (se exhiben nueve piezas procedentes de los depósitos de los mismos Uffizi y de la Villa Corsini), en grande y pequeño formato, así como en los relieves o en la valiosa minuciosidad de la glíptica, acapara todo el protagonismo en esta muestra, que lo exalta por su extraordinario vigor y por sus asombrosas hazañas.

La parte central del recorrido trata el tema de los esfuerzos, ilustrados por grabados, pinturas y otras piezas artísticas además de mostrar temas iconográficos específicos: Hércules en la bifurcación entre el Vicio y la Virtud, que tuvo gran difusión desde el siglo XV al XVIII; el héroe como objeto de estudio y documentación por parte del sector anticuario; la curiosa figuración del Hércules gálico, que arrastra a las masas con su oratoria, representada por cadenas de ámbar y de oro en su boca; el defensor de las musas, que protege las artes de la Avaricia de los mecenas, su peor amenaza siempre al acecho.

I%20mai%20visti%202015-5Además se documenta el aspecto más humano y más vulnerable de este gran mito del imaginario heroico colectivo, visto a través del cristal de la sátira, cuando la reina de Lidia, Ónfale, lo humilla obligándole a desempeñar labores domésticas como hilar la lana y apropiándose de su piel de león (conquista de la primera fatiga) y de la clava.

La literatura de la antigüedad delinea el perfil de un personaje complejo, dotado de fuerza y cualidades heroicas, emanadas por su origen divino junto con aspectos humanos, como la sensibilidad hacia el amor, su talón de Aquiles.

I%20mai%20visti%202015-3Si bien, con su acción benefactora en la tierra liberándola de monstruos asesinos y malhechores, la humanidad le reconoce sus buenas obras hasta el punto de personificarlo con la virtud. Queda claro, pues, el motivo por el cual en la Edad Media el héroe fue colocado entre los autores de una República cívica como Florencia, que lo incluye en los símbolos del gobierno, también rememorados por algunos raros códices.

Su memoria continuadora con el pasado de la ciudad del Arno y siguiendo una tradición retratística antigua que ya había presentado al emperador transformado en este héroe, en la primera parte de su reinado, Cosimo de’Medici, utilizando los más oportunos emblemas propagandísticos del poder ducal, lo tomó como modelo por simbolizar la virtud del príncipe. Y así, Hércules aparece en la decoración conmemorativa del Palacio de la Signoria, en la principal calle cívica, en el jardín privado del castillo e incluso en el sello del duque, también expuesto en esta ocasión.

I%20mai%20visti%202015-6Después de Francisco I, que lo recordó en la decoración de su pequeño estudio, en los techos del primer pasillo de los Uffizi y en la sala de la Tribuna, en época barroca la dimensión humana de fortaleza y robustez de Hércules perdió su significado simbólico para limitarse a mero inspirador de manufacturas artísticas y sensacionales escenografías teatrales para el disfrute de la corte y de la aristocracia florentina.

La historia confirma que también para los mitos impera la caducidad de los momentos de gloria.

Carmen del VANDO BLANCO

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