La Fundació Joan Miró presenta una revisión del trabajo de este artista catalán, uno de los representantes más importantes de la abstracción pictórica en Cataluña. Un total de 200 obras de diferentes soportes, muchas de ellas inéditas, se exhibirán hasta el 27 de septiembre en la sede barcelonesa de la institución
«(…) No me siento artista, yo siento que vivo la vida: doy de comer a los peces, doy de comer a los pájaros, hago de jardinero,voy a la montaña, voy al taller. Pero la pintura también forma parte de mi vida; yo quiero ser pintura. (…) En mi opinión hay dos tipos de pintores: el pintor que pinta el mar desde una distancia, aparentemente a través de una ventana, y el pintor que baja por las rampas, pasa por la arena, se mete dentro del mar y sale teñido de azul». Con estas declaraciones contundentes se describía Borell a sí mismo el pasado 2 de julio en Barcelona cuando se inauguraba esta exposición retrospectiva, que mira por su práctica pictórica a lo largo de seis décadas y los diferentes ámbitos de estudio desarrollados.
Desde el título de la muestra, Alfons Borrell. Trabajos y días, que hace un guiño a su vez a la obra homónima del poeta griego Hesíodo, la exposición es fiel a esta concepción: el relato de un proyecto creativo que late al compás de la vida y que se define como un ejercicio de constancia e intensidad en el tiempo.
- Obra de Alfons Borrell,1982
- Obra de Alfons Borrell,1962.
- Obra de Alfons Borrell,1970
- Obra de Alfons Borrell,1959.
A pesar de su carácter retrospectivo, lo particular de esta propuesta, es que el comisario de la exposición Oriol Vilapuig es también artista, y por ello rebasa el planteamiento cronológico para adoptar la forma de un ensayo abierto que genere interpretaciones múltiples: «la exposición plantea una relectura de un autor de una generación anterior visto desde la perspectiva de un autor de otra generación más joven. No es un estudio historiográfico, sino la mirada de otro artista que activa una manera de ver la obra».
Son siete los apartados en los que despliega el discurso expositivo. Empieza con una antesala titulada Preludio, dispuesta para dar el tono inicial a la muestra. El segundo espacio–La rebelión oblicua: los años sesenta y las acciones Gallot– aborda la participación de Borrell en el grupo de pintura y acción Gallot. Por otra parte, es en el tercero y en el cuarto espacio donde se percibe el cambio en la evolución del pintor con el tratamiento de la naturaleza entendida como fuerza dinámica en constante transformación.
- Obra de Alfons Borell,2010. Colecció Fundació Vila Casas.
- Obra de Alfons Borell, 1976.
- Obra de Alfons Borell, 1978.
- Obra de Alfons Borell, 1978.
La exposición avanza con un quinto apartado donde se analiza la constante experimentación del pintor con los límites a través de la forma cuadrada; y un sexto donde se pone el foco en su concepción del color. El último está dedicado a la idea de variación en la obra de Borrell, y cómo ésta constituye una intensa obra seriada que va más allá de una metodología mecánica de trabajo.
Entre todas las piezas seleccionadas por Vilapuig, se encuentra el film Aigua fosca que realizó el pintor en 1964, y unas notas manuscritas que también se exponen al público por primera vez. Estos apuntes recuerdan las conversaciones que mantuvo con el pintor Hermen Anglada Camarasa cuando asistió a su taller de Port de Pollença en 1950.
Esta muestra se enmarca en el programa conmemorativo del cuadragésimo aniversario de la Fundació Joan Miró, que celebra haber crecido como institución junto a figuras como el pintor protagonista. Borrell estuvo presente en 1976 –año inaugural– con una exposición colectiva dentro del ámbito de investigación titulada, Pintura 1. Dos años más tarde, realizó su primera muestra individual en el Espai 10, actualmente Espai 13, y también participó en la edición conmemorativa de grabados de los 25 años de la Fundació, en 2000.
La exposición está acompañada de una publicación, que completa el proyecto y que incluye textos de Oriol Vilapuig, Jèssica Jaques, Carles Guerra, Álvaro Siza y el propio Alfons Borrell.