La Galería Freijo de Madrid prorroga hasta el 25 de julio la exposición Testigo Documental. El Poder de la imagen en Darío Villalba, dentro del Festival Off de galerías de arte organizado cada año por PHE. Con esta retrospectiva se presenta su aspecto más característico: la manipulación del soporte fotográfico para crear una imagen bella, con fuerza y estupor, que va más allá de lo documental
La obra de Darío Villalba se caracteriza por distorsionar la imagen fotográfica, innovando con un medio expresivo donde plasmar las actitudes y estados anímicos del ser humano. Para ello recurre a temáticas sobre la muerte, la enfermedad, la locura o la soledad. Dos piezas claves que concentran este pensamiento artístico y conceptual son Demente (1974) y Documentos básicos, ejes del discurso que ofrece la Galería Freijo. En esta exposición se ha querido reflexionar sobre el papel documental de la fotografía y el uso plástico, que se puede ejercer sobre esta para dotarla de un poder icónico que hable por sí sola.
Licenciado en Bellas Artes y actual miembro de la Academia de Bellas Artes de San Fernando, este artista comienza su carrera en 1958. Diez años después destaca en la XXV Bienal de Venecia (1970) y en la XII Bienal de Säo Paulo (1973) con uno de sus primeros trabajos en serie, conocido coloquialmente como “encapsulados”, dónde la imagen fotográfica ya aparece manipulada por el propio artista. .
Tras recibir el Premio Nacional de Pintura en 1983, su participación en exposiciones individuales y colectivas se multiplica, exhibiéndose su obra en instituciones internacionales de gran prestigio como el MOMA, el Museo de Arte Moderno de París o el Guggenheim de Nueva York. También se hace sitio en el panorama nacional con importantes retrospectivas, como la que acogió en 2007 el Centro Nacional de Arte Reina Sofía.
Como bien ha escrito Francisco Calvo Serraller, coautor del catálogo, esta exposición persigue mostrar al espectador un conjunto icónico que «(…) realza, a la vez, el valor de la vida humana como algo único y comunitario, y el de la obra de arte, que puede multiplicarse sin perder su singularidad”.
Sara VALVERDE