La muestra El arte del perfume, 1989-2014, comisariada por Chandler Burr, en el Círculo de Bellas Artes de Madrid (hasta el 4 de febrero) es la primera exposición que reivindica al perfume como un medio artístico como puede ser la pintura, la literatura, el cine o la música
Esta muestra es una revisión actualizada de la que se realizó de principios de noviembre de 2012 a febrero de 2013 en el Museo de Arte y Diseño de Nueva York y que tuvo un gran éxito de público. Su comisario, Chandler Burr presenta a los maestros perfumistas como artistas y sus trabajos olfativos como si fuesen obras de arte a la vez que los asocia con los movimientos estéticos en los que se inspiraron.
Como dijo Chandler Burr sobre esta exposición: «Según cualquier definición racional del arte, los trabajos olfativos cumplen con todos los criterios. En 1950 las fotografías eran percibidas como nada más que pequeños espejos de la realidad. Ahora entendemos que están cargadas de subjetividad y absolutamente manipuladas, como el arte. Picasso dijo: ‘El arte es una mentira que nos hace ver la verdad, al menos la verdad que nos es dada para comprender’. En 1889 Aimé Guerlain esculpió la gloriosa mentira que es Jicky a partir de las moléculas sintéticas que empezaban a liberar a los artistas olfativos de las limitaciones de la naturaleza. El Arte del Perfume, 1889-2014, presenta este y otros siete brillantes, maravillosos trabajos de la verdad que se nos ha dado para comprender»,
La exposición presenta ocho perfumes y cada uno de ellos está asociado a una corriente artística: el romanticismo, Jicky, por Aimé Guerlain para Guerlain; el modernbimo, Chanes Nº 5, por Ernest Beaux para Chanel; el surrealismo, Ángel, por Olivier Crespo para Thierry Mugler: el neorromanticismo, Prada Amber, por Carlos Benaïm, Max Gavarry y Clément Gavarry para Prada; fotorrealismo, Eau de Lierre, por Fabrice Pellegin para Diptyque; el figurativo contemporáneo, J’adore L’Absolu, por François Demachy para Dior; el neoclasicismo, Agua Universalis, por Francis Kurkdijan para Marin Francis Kurkdjian, y el retro siglo XX, Aura, por Emilio Valeros para Loewe.
Todos los trabajos olfativos exhibidos pueden comprarse en las tiendas de las propias marcas y en una selección de centros de El Corte Inglés.
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